TREKKING I 13 km I 1.150 m+

Pico Nabaín (1.799 m) desde Jánovas

ENTRE FAJAS, BOJES Y ERIZONES

LA PRIMERA NEVADA DEL OTOÑO ES UNA INVITACIÓN INELUDIBLE PARA SUBIR AL PANORÁMICO PICO NABAÍN Y OTEAR MEDIO SOBRARBE DESDE LAS ALTURAS. EL VIEJO CAMINO DE JÁNOVAS, RESCATADO DEL OLVIDO HACE POCO TIEMPO, SE ENCARAMA AL MACIZO DE SANTA MARINA ENTRE ESPECTACULARES FAJAS, BOSQUES DE BOJ Y MANTOS DE ERIZONES.

Texto y fotos: Sergio Fernández Tolosa & Amelia Herrero Becker

Tras dos días de lluvias, el río Ara baja pletórico y las cimas del Pirineo se han vestido de blanco. Ha sido la primera nevada del otoño. En el puente de Jánovas, el termómetro marca 5º C a las 10 de la mañana. El cielo está despejado. Parece la jornada ideal para ascender al Pico Nabaín (1.799 m), también llamado Santa Marina. Nosotros ya conocemos su panorámica cumbre, pero la otra vez iniciamos la excursión en el pueblo de Ascaso. Hoy vamos a subir desde Jánovas por un sendero que ha sido recuperado y señalizado recientemente.

RECORRIDO

13 km

Itinerario lineal de ascensión al panorámico Pico Nabaín (1.799 m), cima más alta del Macizo de Santa Marina, con inicio y final en el Puente Colgante de Jánovas, a 643 msnm.

DESNIVEL

1.150 m+

Atención a la dura y constante pendiente, sobre todo en la parte baja del recorrido; luego se suaviza bastante. A lo largo de la subida sólo hay un breve descanso.

DIFICULTAD

3/5

Toda la excursión es por sendero de media montaña con firme variado: tierra, piedras, roca… Carece de exposición, pero sí hay un par de puntos de relieve ataludado.

ATRACTIVOS

☆ ☆ ☆

Las aguas bravas del Ara, la Foz de Jánovas, el puente colgante de 1881, los riscos de las fajas de Santa Marina, las vistas panorámicas de medio Sobrarbe desde la cima...

PUENTE A UN PASADO INCIERTO

La excursión comienza a orillas del Ara, el único gran río salvaje del Pirineo. El único libre de presas. Estamos en su margen izquierdo, junto a un puente colgante que fue erigido nada menos que en 1881. “Por esta pasarela cruzó Lucien Briet…”.

Al otro lado se encuentra el pueblo de Jánovas, trístemente célebre por su historia maldita. Un proyecto de embalse obligó a sus vecinos a marchar. Sus tierras fueron expropiadas y las casas, dinamitadas. Las obras empezaron. Se hicieron muros, diques y túneles para desviar el cauce y reducir su caudal, pero el río nunca fue detenido. Hoy, un siglo después de la primera amenaza de expulsión, algunos de los herederos de aquellas viviendas han vuelto a reconstruirlas.

DESFILADERO DE JÁNOVAS

El sendero se encarama rápidamente hacia el Mirador de Jánovas, que queda entre dos curvas de la N-260 –imposible desviar la mirada o eludir comentar la vergonzosa acumulación de basura en este punto–. Cruzamos la carretera con sumo cuidado y seguimos subiendo por la estrecha vereda, que trepa impoluta entre carrascas, cajigos y algún que otro madroño.

Muy pronto, la perspectiva nos regala una buena imagen de los contrafuertes de La Foz de Jánovas, el desfiladero donde el Ara corta a cuchillo el gran pliegue anticlinal de Boltaña. Justo ahí, entre los estratos verticales que parecen el esqueleto de una ballena antediluviana, querían encajar la presa.

UN SOPLO DE AIRE FRESCO

La ruta sigue subiendo sin descanso, hasta que salimos del bosque y entramos en los dominios del boj y el erizón. El sinuoso camino se abre paso sobre imponentes acantilados, pero siempre prudente, alejado de las verticales fajanas.

En el monte abierto, el aire refresca. Todavía quedan 500 metros de desnivel para llegar a la cumbre y el panorama se engrandece por momentos. El Valle del Ara, la sierras del Gabardón y de la Corona quedan a nuestras espaldas. Enfrente, los riscos del Tozal de Pecuto, Punta las Diez y la Fajana Tobiella se muestran inconquistables.

BUENAS –Y BREVES– VISTAS

Tras un último esfuerzo, alcanzamos el primer y único llano del itinerario. Al otro lado asoman la silueta inconfundible de la Peña Montañesa y se adivinan las del Cotiella y Punta Lierga. Ya sólo restan 200 metros positivos para llegar a las ruinas de la ermita de Santa Marina, que yacen en la cima del macizo. Las nubes han cubierto las cumbres más altas y lejanas. Hoy no veremos el Monte Perdido, pero sí los Sestrales, el Cañón de Añisclo, el Mondoto, Punta Suelza, Punta Fuesa…

El viento helado y las nubes obligan a taparse, masticar rápido el bocadillo y apurar el té antes de que se entibie. Tras un rato identificando pueblos y despoblados del Valle de Solana desde lo alto –Giral, Castellar, Burgasé...–, llega el momento de regresar al presente, deshaciendo el mismo camino, pero de bajada. Al fondo del valle, el Ara sigue su curso.

→ DURACIÓN Hay que calcular unas 3 h para la ascensión y 2 h para la bajada. En total, con el pícnic, entre 5 y 6 h.

→ ÉPOCA IDEAL A finales de otoño o en invierno, cuando el Pirineo está nevado. A principio del verano, cuando el erizón florece, la montaña de Nabaín se tiñe de amarillo.

→ CARTOGRAFÍA Hemos utilizado la hoja norte del mapa de la Editorial Alpina Sobrarbe Central, de escala 1:40.000, en su edición 2021-2022. También instalamos la versión digital en el TwoNav, para así ver el mismo mapa en la pantalla del GPS.

→ ORIENTACIÓN La ruta está balizada con algunos hitos de piedras y señales de madera en los pocos cruces que existen. El único sector no indicado es entre el aparcamiento del puente y el Mirador de Jánovas (atención: no hay que entrar en los túneles; el track pasa por arriba).

→ AGUA No vimos ninguna fuente, ni arroyo, ni surgencia de caudal estable durante el recorrido. Conviene cargar agua, especialmente en época calurosa. Sólo hay sombra en la zona baja del itinerario.

→ CALZADO El terreno es de media montaña, con firme muy variado en el que predomina la roca y la piedra. La pendiente es fuerte, sobre todo en la parte inferior del recorrido. Conviene llevar suelas que retengan. Los bastones de trekking también serán de ayuda. Nosotros utilizamos las Bestard Android y las Bestard Bosc.

→ ABRIGO Es necesario llevar ropa que cubra un amplio rango de temperaturas –primera capa, capa intermedia y capa exterior– porque la sensación térmica puede cambiar muchísimo a lo largo del recorrido.

→ COMIDA La ruta no pasa por ningún punto en el que avituallarse. Nuestro pícnic consistió en un pequeño bocadillo, frutos secos, fruta fresca y unas barritas energéticas por si la cosa se alargaba.

→ DORMIR En Jánovas se están recuperando algunas viviendas, pero los alojamientos más cercanos se encuentran en Boltaña.

→ CÓMO LLEGAR La excursión comienza y termina en el aparcamiento del Puente Colgante de Jánovas, en la comarca de Sobrarbe, Huesca.

→ ENCANTARÁ… A excursionistas con ganas de otear casi todo el Sobrarbe desde un mirador de auténtico lujo.

→ CONTRAINDICADA PARA… Compiladores de cumbres de más de equis mil metros.

Nabaín desde Jánovas